Cuentos de la selva

He descubierto un libro llamado cuentos de la selva que es muy interesante. Trata sobre animales que viven aventuras y te van contando como se las arreglan para salir de esos apuros. Es muy entretenido. A  mí me ha encantado. Tiene la letra mediana pero a pesar de ello se lee rápido. No es un solo cuento hay muchos,esto es una ventaja porque así puedes disfrutar de todos. El cuento que más me ha gustado es el de La Tortuga Gigante. Trata de un hombre que esta enfermo,  y su médico le receta irse unos días al campo para que se mejore. Entonces él se va, y al cabo de unos días vuelve a estar mejor. Le entró apetito así que se fue a cazar. Por el camino, cerca de un pantano, se encontró a un tigre que estaba comiéndose a una tortuga. La tortuga era grande, es más, enorme. El tigre, cuando vio al hombre se abalanzó sobre él, pero el hombre que tenía muy buena puntería le disparó entre los dos ojos y le partió la cabeza. Después dijo: ¡Hombre!, voy a comer carne de tortuga que dicen que está muy rica. Pero cuando ya la iba a cocinar le dio pena y decidió curarla. Le dio todos los cuidados que necesitaba y la sentó en un rincón. Al cabo de unas semanas volvió a estar mejor. Pero entonces fue el hombre el que se puso enfermo y además se puso muy grave. Ay Ay, me voy a morir, pues mi remedio solo lo encontraré en la ciudad, aquí no habrá nadie que me cure. Y a continuación de esto se desmayó. La tortuga pensó: El hombre me ha ayudado. Ahora debo ayudarle a él y tomó una decisión. Ir a la ciudad y llevarle a él a cuestas. Era una dura tarea pero al final consiguió cargar todo sobre su espalda y se puso en camino. Era un viaje muy largo, caminó y caminó, cuando de pronto, vio unas luces a lo lejos pero ella estaba cansadisima y no sabia que aquellas luces eran ya de la ciudad y se derrumbó en el suelo. Al cabo de un rato pasó por allí un caminante, y al ver a la tortuga y al hombre moribundos le dijo a la tortuga: mira mira ¿ves aquellas luces? Pues son ya las luces de la ciudad. Entonces a la tortuga le entró una fuerza impresionante y se puso en marcha con más ganas que nunca. Al fin llegó y lo llevó al médico. Cuando el hombre recuperó el conocimiento y descubrió quien lo había llevado se puso contentísimo. Ya nadie pudo separarlos más .Este cuento me ha gustado pues en él se ve como la tortuga y el hombre se prestan ayuda mutuamente.